diumenge, 23 de desembre del 2018

Pesadilla antes de Navidad (Mi Maratón de Valencia)

Ha costado mucho, incluso en algún momento pensé en no hacerla, pero luego vi que de no hacerlo se perderían más cosas buenas que las malas. 

Por ello, os dejo el link a mi crónica de todo el proceso que me llevo a conseguir mi sexta maratón. 


Descargar

Espero que os guste.




Y os dejo el vídeo de la entrada.



PD: Es larga, o sea, que aprovechar algún resopón navideño, ¡jaja! 

dijous, 15 de novembre del 2018

Buenas! 

Como ya sabéis tod@s estoy preparándome para la Maratón Valencia del próximo día 02.12.18.

Esta vez no he realizado ningún reto solidario, necesitaba tiempo de descanso yo y vosotros 😂.

Pero el lunes, Anna de la Fundació Miquel Valls me pidió si podía "ayudarles" o si queria presentarme al concurso que montaba Giving Tuesday ES. El concurso pedía que explicará #YoDonoPorque y mi experiencia.

Tarde poco en decirle que contará conmigo y ayer lo puse en marcha.

Ahora soy yo el que os pido contar con vosotros. Esta vez es muy fácil, 2' y sin coste alguno.

Soy hay que entrar en este link, poner un email y confirmar un email que os enviaran. ⬇️⬇️

https://t.co/a0UMJzBw9q


🥁🥁📢Cada email es un voto 

Si quedamos entre los 10 más votados pasaremos a la fase final. En esta fase un jurado elegirá los 3 ganadores que conseguirán un donativo de 3000€ (el primer premio) y de 1500€ los siguientes para su ONG o Fundación.

Es muy fácil. Me ayudáis, mejor dicho, nos ayudáis!

Gracias de nuevo por hacer caso a este loco! 😂👏

Os dejo aquí debajo el escrito que hice, por si alguien se lo quiere leer antes de decidir si nos mereces el voto. 

"La pregunta parece fácil, pero no lo es. Realmente no sé porque dono, mi caso es extraño. No tengo ningún familiar directo, amigo o alguien cercano que haya o esté padeciendo la ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). Me parece muy loable la gente que se implica cuando algo les sucede de primera mano, pero porque no hacerlo por ayudar. Sin esperar nada a cambio.

Ese es mi caso, mejor dicho nuestro caso. Un pequeño grupo de amigos, que empiezan a correr por mejorar su estado físico, y poco a poco se van proponiendo retos. Y lo que comienza con retos personal, acaba con la “necesidad” de ayudar a los demás.
Empecé participando con una pequeña donación en retos que realizaban otras personas, pero un día preparando mí tercera maratón, decidí que era el momento de hacer el mío. ¿Por qué no?. 

Dicen que las cosas son más fáciles si se hacen con amigos, y no me costó mucho convencer a mi equipo “Los Martes” de intentarlo. Somos 4 corredores aficionados, pero eso no nos paró. Nos pusimos en contacto con Anna de la Fundación Miquel Valls. Nos explicó su proyecto, el trabajo que realizaban y que harían con lo poco o mucho que consiguiéramos. 

Y partir de aquí, solo quedo poner horas, esfuerzo, imaginación y constancia para conseguir reunir más de 3500€ en el primer año. 

Pero como de todo se aprende en esta vida, y aunque el mundo dice que las segundas partes nunca fueron buenas, nosotros no nos lo creíamos y lo intentamos una segunda vez. 

Corrigiendo los “fallos” de principiantes y mejorando en aquellas cosas que la experiencia te da. Y así fue como el siguiente año conseguimos superarnos y recaudar más de 5800€.

A todo esto se sumaba nuestro reto atlético (correr la Maratón de Barcelona), pero pocos antes del pistoletazo inicial se sentían campeones, y nosotros sí. 

Han sido dos experiencias magníficas, esplendidas y gratificantes. Aunque no os mentiré, también ha sido agotador y a veces decepcionante, pero que todo lo malo se olvidaba y quedaba lo bueno cuando a finales de Marzo. Cuando compartíamos una tarde con Anna y nos explicaba lo que podrían hacer con el dinero recogido y lo orgullosos que estaban de nosotros.

Tengo la foto que nos regaló el segundo año en una estantería de mi casa. Para mí es el regalo más preciado del mundo y del que me siento más orgulloso.

Y solo os puedo decir que aquí estoy otra vez por ello, por intentar conseguir que ellos consigan un nuevo donativo, una nueva forma de ayudarles.

Si no lo habéis hecho nunca, ¡animaros! Yo y mis compañeros lo volveremos a intentar.

¡Muchas Gracias!"

dilluns, 24 de setembre del 2018

Cross Ametlla Merola


Como ya va siendo habitual (y ya veréis el porqué), Los Martes volvemos un año más al Cross de la Ametlla de Merola.

Este año es especial, por primera vez correrán las peques del equipo (Júlia y Ona). Han estado “entrenándose” durante este verano y vienen muy animadas.
Y yo, porque pocas veces, días antes de una carrera, sabes que subirás al pódium. Y no será por mis cualidades atléticas (por ellas, soy uno de los del montón), sino por mi persistencia. Este año haré mi décima participación seguida, y los organizadores de este evento, te regalan un cuadro conmemorativo, con los 10 logos de las carreras que he realizado. Es todo un detalle, que agradezco enormemente, y que hace que año tras año volvamos a esta carrera.



Pero vamos al lío.

Como las peques corren, tenemos que salir un poco antes. Así que hemos quedado en Olesa a las 7:45h.

A las 8:30h, ya estamos todos en la Colonia, y unos voluntarios de la carrera nos indican donde aparcar nuestros coches. Se nota que hemos llegado pronto, porque todavía no hay muchos coches.

Los animadores se quedan a desayunar en el bar del pueblo, y el resto (los corredores), nos vamos a buscar los dorsales.

Como este año la carrera coincide con la Carrera de la Mercè (Barcelona), hay menos participantes (250 aprox.) y ninguna cola.

Cogemos lo nuestro y hacemos un pequeño reconocimiento del recorrido de los peques, para darles un poco de seguridad y que sepan por donde tienen que ir.
La primera sorpresa que nos llevamos, es que tienen que subir un tramo de escaleras, ¡como mola! El recorrido tiene de todo, escaleras, hierba, asfalto, pueblo, … y aunque dice que son 600 metros me parece que son algunos más. Se lo comentamos a las peques, puesto que con ellas lo máximo que hemos corrido son 600 metros, y les comentamos que salgan flojito para aguantar la carrera.

Por el camino podemos ir saludando a amigos y conocidos (Jorfer, Jordi Mas, Candido, …) y antes de las 9:30h dejamos a Ona y Júlia en la línea de salida.

Nosotros nos ubicamos un poco más adelante, para poder animarlas mejor y hacerles alguna foto.

Salen y a los pocos segundos ya las vemos, Han hecho el primer tramo de subida y se les ve contentas.

Desde donde nos hemos puesto las podemos ver en dos tramos de la carrera, y eso les gusta.


Una vez animadas y ya dentro del pueblo, nos vamos hacia la llegada para hacerles la foto de rigor.

Y sorpresa, ya vienen. Van muy bien, incluso esprintando al final.



Ona llega cuarta y Júlia quinta. Están contentas, se lo han pasado bien, y tienen una medalla. Nosotros también estamos muy orgullosos de ellas, se lo han currado mucho.


Recogen también sus bolsas de obsequios.

Me encantan las carreras infantiles que todos tienen su medalla. Creo que es importante para que los atraiga. Después si quiere la organización, puede dar premios por clasificación, pero que todos tengan su premio.

Después de todo esto, toca prepararnos a los adultos.

En mi caso, tengo que calentar bien. Ayer estuve buscando setas con mi padre. Fue un día espectacular, cogimos 13 kilos de camagrocs (trompeta amarilla). Ahora, fueron 4 horas de rodillas por el bosque, y me ha dejado unas agujetas en los glúteos, que hoy me van a dar el día.


Cada paso que doy, es una molestia en el glúteo, pero nada que me vaya impedir acabar la carrera.

Nos hacemos foto de rigor, y a prepararnos.


Salimos a las 10:15h. Hace mucho calor. Fede sale rápido. Jordi va conmigo, y Robert se ha quedado un poco más atrás.

Jordi no se ha levantado bien. Ha pasado mala noche y piensa que solo hará la de 5 kilómetros (en esta carrera puedes decirlo sobre la marcha).

Voy controlando no pasarme con el ritmo. Vengo de correr jueves y viernes, a parte de la excursión de setas del sábado, por lo tanto, en mi planificación de cara a la Maratón de Valencia, toca hacer los 10 kilómetros a un ritmo de 5’/km o 5’15”/km.

Antes del kilómetro 1, vemos a nuestras animadoras. ¡Cómo me gusta!


Fede sigue delante, pero pienso que en las primeras cuestas ya lo pillaré.

Pero no es así, aguanta allí delante.

Con Jordi pasamos las dos cuestas (la dura es la segunda y última).

De camino hacia el pueblo, Jordi me comenta que se encuentra flojo y que vuelve a tener molestias en la boca del estómago.

Y ya estamos en el pueblo. Y llegamos a la zona más bonita (al menos para mí) del recorrido. Es la vuelta a la plaza. No es un paraje espectacular, pero nuestras fans siempre están ahí. Y solo vernos ya están gritándonos y animándonos. Y eso nos hace sentirnos, unos campeones.

También nos permite saludar a Fede.

Chocamos las manitas de las peques, y Jordi avisa que se parará a la primera vuelta.




Me despido de Jordi. Él se va para la izquierda (y la meta) y yo para la derecha.

Mi paso por el 5000m es de 23’45”. Buen ritmo, y un minuto y pico más rápido de lo planificado.

Cojo agua, me hidrato y me remojo la gorra y la nuca.

Por la zona de los huertos, veo a Fede delante. Ahora ya quedamos menos corredores y es fácil correr y divisar a los otros compañeros.

Pero no es hasta pasado el kilómetro 6, que veo que los andares de Fede me dan a conocer que empieza a sufrir. Es lo que tiene llevar tantos años juntos, ya nos conocemos solo viéndonos.

Y es intuición, no me falla. Antes del kilómetro 7, ya estoy detrás de él. Y él lo sabe, porque solo llegar, ya me dice: ¡Hola!

Vamos por la zona del bosque, juntos. Me comenta que va justillo. Yo le contesto que voy bastante bien, pero que no apretaré.

En las primeras rampas, Fede se queda. Yo sigo a lo mío. Sin apretar pero intentando no bajar el ritmo.

Ya queda la parte fácil. La gran bajada, el paso por el pueblo y la llegada.



Pienso que si están Ona, Júlia y Arnau entraré en meta con ellos. Y los cuatro con las palmas abiertas, indicando que es mi carrera número diez (en este cross).

Pero todo esto se desmonta, porque al volver a pasar por la Plaza, veo a Ona y Esther. Le choco la mano y me voy hacia la meta.

Como ya no entraré con mi niña, decido apretar. Pero me dura hasta que salgo del túnel, y al girar veo a mi sobrina que me dice que quiere entrar conmigo.

La cojo de la mano, y entramos juntos.

Al final, 47’11”. Estoy contento. He hecho la segunda vuelta 19” más rápido que la primera. Y eso es difícil por el día de calor que ha hecho, y por el recorrido (a dos vueltas, pero donde las subidas parecen más duras en la segunda de ellas).
Salgo reforzado anímicamente de esta carrera. El reto de final de año (la Maratón de Valencia) va por el buen camino.

Sera la primera vez que corro dos maratones en el mismo año.

Al poco llega Fede. Ha hecho 47’42”. Como siempre dándolo todo. ¡Qué grande eres, company!

Jordi, al final ha hecho la de 5 kilómetros en 23’52”.

A ducharnos, y a esperar el gran momento.

Pero antes, ¡sorpresa!

Las dos peques han ganado un libro de cuentos, con el sorteo que hacen los con los números de los dorsales.

Y después, suben al pódium de las pre-benjamines. Están súper emocionadas, y nosotros orgullosos de ellas.



Unos minutos más tarde, por fin debuto (por méritos propios) en un pódium, ¡jaja!


Ahora a seguir con los entrenamientos, con la “locura” de seguir contando kilómetros por twitter y facebook para animar a Carles Castillejos en su recuperación.

Todo empezó como una idea loca de recoger los kilómetros que este gran atleta iba a realizar para su preparación de la Maratón de Nueva York (unos 2000) y a día de hoy hemos pasado de los 20000. Y alguna sorpresa más que habrá, y hasta ahí puedo leer (para los jóvenes, esto lo decía Mayra Gómez Kemp en un programa que se llamaba el Un, dos, tres).

Nos vemos! Seguimos!

Con la cabeza puesta en esa alfombra azul de la Ciutat de les Arts.

dilluns, 2 de juliol del 2018

Cursa Pallejà


Ya llegó un nuevo final de temporada, y como ya viene siendo habitual, lo haremos en Pallejà. Y más este año, que coincide con el día de mi 42 aniversario.

Pero como toda historia, todo empieza unas semanas antes.

Hace un mes y medio, aproximadamente, mi hermano me comenta que quiere prepararse para hacer sub 40’ en la Cursa del Foc de Olesa de Montserrat. Yo no estoy por la labor, no me apetece nada apretarme, pero le comento que sí que saldré con él a hacer las series de los sábados. No sé las que aguantaré y a qué ritmo, pero lo probaremos.

La sorpresa es mayúscula cuando el primer día aguanto 4 series de 1000 metros por debajo de 4’/km. Salgo muy contento de ese entreno. No esperaba estar en esos tiempos, incluso la noche de antes me parecía rápido ir a 4’15”/km.

Dos buenos ensayos más, con 6 series de 500 metros, me hacen pensar, en qué bonito podía ser cumplir años, acabar una temporada con buen gusto de boca y hacer marca en los 5 kilómetros.

Sé las dificultades que hay. El circuito no es totalmente plano. El calor empieza a apretar, y tampoco he hecho una planificación y un entrenamiento específico para ello, pero lo intentaré.

Así que me animo, y ya tenemos objetivo para la Cursa de Pallejà. Iremos a batir los 20’31” que tengo del año 2014 en la Sansi de Viladecans (del mes de diciembre, o sea, condiciones totalmente opuestas (plano y frío)).

Llega el día.

Almuerzo lo de siempre. Lo que me funciona.
Sobre la ropa que ponerme, tengo más dudas. ¿Camiseta con mangas o sin mangas? ¿Pantalón corto o súper corto? Al final, me decido por la ropa más corta, no quiero pasar calor. Parece que estaremos a unos 25ºC. De todas maneras hecho otra camiseta y otro pantalón a la mochila, por si al final me lo repienso.

Nervios en la barriga.  No sé si es bueno o no, pero me indica que hoy sí que tengo un reto grande entre mis manos.

Me voy de casa, intentando no despertar a mis dos fans. Pero dándoles un besillo como cada día. Esther ya me felicita. Ona todavía duerme profundamente, después del festival de Ballet de ayer. Madre mía que espectáculo montan la Escuela de Baile Noemí Rubira! Se lo curran mucho y pasas 2h muy entretenidas viendo todos los bailes y danzas, y sobretodo, cuando ves los progresos y los bailes de mi peque (que ya no es tan peque, ¡jaja!)

A las 7:30h ya estoy en casa de Fede. Tiene sueño. El golfo se fue de parranda ayer, y se acostó a las 3h. Pero ahí está, al pie del cañón.

Ya he recibido los ánimos y felicitaciones de mi hermano, mi cuñada y mis dos sobrinillos (Júlia y Arnau). Mi hermano está ahí en que bajaré de 20’, pero yo no lo creo. El recorrido y el calor me harán mella, pero lo intentaremos.

A las 7:45h ya estamos aparcados enfrente del campo de fútbol. Para nosotros es como ir a correr un martes cualquiera. Es nuestro punto de encuentro para quedar con Sandra y Fede, y hacer nuestro entreno semanal.

Dani (Hoommerr) ya ha llegado. Me dice que está cogiendo el dorsal. Le envío un mensaje diciéndole que ya vamos para allí.

Llegamos a la plaza. Ya vemos a Dani. Le saludamos y vamos a mirar nuestro número de dorsal. Y … ¡Sorpresa! No salimos en el listado. Primer problema.

También compruebo que finalmente las salidas de las dos carreras serán conjuntas. Está planificado que salieran 10’ antes los de 5 kilómetros que los de 10 kilómetros. Este cambio me gusta. Así podré hacer la táctica que llevo días pensando. Mi idea es salir con la liebre de 40’ y seguirla los dos primeros kilómetros. Luego dejarla, y llevarla un poco delante para que me de alas para conseguir la marca.

Pero la táctica no sirve de nada, si no solucionamos antes el primer escollo. Nos vamos a hablar con incidencias. Le comento que somos de corredors.cat y que los que nos apuntamos por su TPV, no salimos en la lista.

Parece ser que ha habido un pequeño problema, pero rápidamente se ponen manos a la obra, para solucionarlo.

Esperando a ver si se soluciona, llega Josep (Wolves), Sandman y otros compañeros de corredors.cat. Vamos charlando y comentando la jugada.

A los 5’, el hombre de la organización me da los dorsales de todos los compañeros. Han sido muy efectivos. Le damos las gracias, y comienzo a repartirlos. No todo el mundo ha llegado, por lo tanto, le devolvemos los que todavía no han pasado a buscarlos, para que se los entregue él.

Nos vamos a buscar la camiseta y el buff que regala la cursa.

A Fede y Dani les ha tocado un buff de regalo extra.

Nos acabamos de arreglar y dejamos las mochilas en guardarropía.

Y ahora a calentar.

Aunque al trote, hacemos dos vueltas a la recta de salida, para dejar las piernas entonadas.

Ya nos colocamos en la salida.

Las liebres llegan un poco más tarde.

La de 40’ se ha colocado un poco delante, pero ya no puedo llegar hasta donde esta ella. Así que saldré unos metros por detrás.

Antes de empezar nos deseamos suerte. Fede intentará ir detrás de mí y Dani buscará bajar de 22’30” (por ello se ha colocado al lado de la liebre de 45’, o mejor dicho, se ha colocado la liebre a su lado, porque él quería salir un poco por delante).

A las 9h, chupinazo, y salimos.

Salgo unos 7” más tarde que los primeros. Intento coger esta referencia para luego cuando divise el reloj de llegada ver si voy en tiempo del objetivo o no.

Los primeros metros cuesta un poco, pero consigo un espacio limpio y ya me pongo a ritmos por debajo de 4’/km.

La idea es hacer muy rápidos los dos primeros kilómetros, con perfil a favor. No sufrir mucho en la subida cerca del kilómetro 3. Intentar recuperar el ritmo rápido hasta la subida por detrás del Ayuntamiento. Y después intentarlo dar todo.

El paso por el primer kilómetro es muy rápido, 3’55”. Le he cogido 10” al tiempo que debo hacer, por lo tanto vamos bien.
Seguimos hacia el segundo kilómetro.

Todavía no hemos cogido zonas de Sol, por lo tanto, por la sombra no se nota mucha el calor.

Giramos, pisamos la alfombra, y nos vamos hacia el punto kilómetro 2.

El paso ha sido más lento, 4’01”, pero hemos ganado 4” segundos más a nuestro objetivo.

Y ya nos vamos hacía el tramo más duro.

Por ahora la liebre de 40’ todavía la tengo a tocar. Me siento bien de piernas y de ritmo, pero busco relajar un poco para no sufrir mucho en la subida.

Y llegamos. No es una subida muy larga y con mucha pendiente, pero a estos ritmos se nota. Aquí sí que da el Sol de pleno, por lo tanto, más esfuerzo. No miro mucho el reloj, pero no se me hace muy larga y llego con buenas sensaciones arriba, aunque con las piernas algo molestas.

Intento recuperarme pronto, y ya pasamos por el kilómetro 3. Ritmo de 4’18”. He perdido casi los 14” segundos que llevaba ganados. Solo me sobra 1”. Pero lo prefiero, porque todavía tengo fuerzas para apretar al final (si hace falta).

Giramos 180º y al volver ya veo a Fede, que me anima. Que bien sienta eso.
A partir de aquí, me pongo al lado de la mujer que va en segunda posición. El ritmo suyo es rápido y ya me va bien.

A media recta, paso por debajo de la manguera (hay que bajar el calor). Decido no coger agua, y encarar lo mejor posible el paso por detrás del Ayuntamiento. Toca apretar los dientes, y más sabiendo que luego podré recuperar algunos segundos.

Lo consigo pasar mejor de lo previsto, pero el paso por el kilómetro 4 no me dice lo mismo. Este kilómetro ha sido el más lento, 4’19”. Voy 13” segundos por encima de mi mejor marca.

Como el recorrido ahora lo permite, toca apretar en la bajada, para recuperar esos segundos y algunos más.

Sigo al lado de la segunda mujer, y creo que me va bien.

Último repecho, rotonda y ya estamos en recta de meta.

Son 400 metros. No sé de donde, pero me salen fuerzas del más allá. Empiezo a apretar, y las piernas responden. A lo lejos veo el reloj de meta y todavía le quedan unos segundos para llegar a los 20’. Sé que tengo 7” se margen con él, respecto a mi salida. Bajar de 20’ será imposible, pero la marca si que la podré superar.

Y lo doy todo, llegando a meta con un tiempo oficial de 20’12”. Último kilómetro del polar en 3’39”, aunque sale algo corta la carrera.


Estoy cansado, tengo que recuperar un poco de aire del esfuerzo, pero lo he conseguido. He bajado mi Mejor Marca Personal en 19”, en un circuito más exigente y con una temperatura más dura. Estoy súper contento, que más podíamos pedir.

Al poco llega Fede, con un tiempo de 20’47”. ¡Bravo company! ¡Qué grande eres!


Nos recuperamos y cogiendo la bolsa, bebidas y comida (sandía y melón), vemos que Dani también ha llegado. Ha hecho 21’49”. Otro que se sale. 41” menos de lo que se había propuesto. ¡Felicidades!


Y encima parece el día de Dani. Le tocó el dorsal para la carrera, le toca un buff antes de empezar, y tiene premio en el sorteo de la carrera. Solo le falta que Axel Rose le suba al escenario del concierto de Guns N’ Roses esta noche, ¡jaja!

Y esperando, llega Josep (Wolves). Nos dijo que quería ir con la liebre de 60’, y el tío llega en 27’41”. Otro que se sale. ¡Madre mía, como hemos acabado la temporada!


Dani marcha rápido por temas familiares, pero los otros 3 nos vamos a hacer un cortadito y celebrar mi cumpleaños.


Ahora toca descansar. Ha sido una temporada repleta de retos deportivos y solidarios, y que acaba con muy buenos resultados.

Personalmente ha estado genial. MMP en media maratón, en 5 kilómetros, y por 20” no fue en la Maratón. 2000€ más recaudados en el reto solidario que el año anterior. Y otras carreras donde he podido ayudar a amigos, compañeros o simplemente otros corredores a hacer realidad sus sueños.

A descansar (que no quiere decir parar de correr), a planificar la próxima, y esperando con mucha ilusión el 16 de septiembre, donde subiré al podio del Cross de l’Ametlla de Merola (décima participación seguida). Empezaremos la temporada por todo lo alto, por lo tanto, esperaros que la próxima temporada será, ¡más y mejor!

¡Buenas vacaciones a todos!



dimarts, 19 de juny del 2018

Cursa del Foc


Esta crónica empezará por el final, por la carrera infantil.

Pero vamos a explicarlo bien.

Hace un mes, aproximadamente, hice de liebre en la carrera de Martorell. 

Después Ona hizo su carrera infantil. Estando por la tarde en el sofá, compruebo que Ona ha quedado cuarta. Por 7” no subió al pódium. Cuando se lo digo a Ona, se gira y me dice: “Papa, hemos de entrenar para la cursa del Foc”. Me quedó parado. Atónito. Pero me gusta su reacción.

Quedamos que durante esas 3 semanas, saldremos un rato los domingos por la tarde. Intento mirar cómo hacerlo, puesto que no tengo ni idea. Pero decido que más que entrenar, vamos a pasar un rato divertido entre padre e hija.

El primer domingo llueve, y lo suspendemos.

El segundo, nos vestimos y nos vamos a un polígono que hay al lado de casa. 

Buscamos una callejuela con sombra y empezamos a hacer algunos ejercicios. 

Ona se le pasa en grande, y yo más. Hacemos una vuelta de 600 metros, lo que deberá hacer el día de la carrera. Después de estirar y las fotos de rigor, para el postureo, ¡jaja! nos vamos para casa. Ha sido 30’ muy divertidos.


La tercera semana, decidimos cambiar el día de entreno. Por logística familiar. 

Así que lo adelantamos al sábado por la tarde. Nos vamos un rato a la playa, a jugar por la arena, hacer 4 ejercicios, y a mojarnos los pies en el agua.

Y por fin llega el día de la carrera.

A las 10:30h salen todos los benjamines y prebenjamines, y buen puñado.


Intento seguir y animar a Ona desde fuera, pero ella va más rápida y la acera está llena. Por eso, decido pasarme al otro lado, y esperar que vuelva.

Por allí también va Júlia, mi sobrina. Con su top de rítmica, ¡jaja!

Al rato, la veo. Ahí viene. La ánimo, y cuando faltan 150 metros para llegar a meta, la dejo de nuevo. Imposible pasar por la acera. Esta toda llena de padres, madres, abuelos, abuelas, … haciendo miles de fotos a estas campeonas y estos campeones.


Vuelvo a ver y animar a mi sobrina, que también está haciendo una buena carrera.

Me voy a buscar a Ona a la zona del avituallamiento. Ya ha recogido la bolsa de obsequios y su trozo de sandía.

Le pregunto que como ha ido. Dice que se lo ha pasado muy bien, y que al final ha hecho un sprint, ¡jaja!

Después de un rato, me pregunta que cuando iremos a mirar su clasificación. Le digo que se espere un poco, que todavía no han salido. No creo que haya ganado nada. Pero al final insiste tanto, que decido llevármela a ver si han salido ya.

Y llegamos a la lista, y allí esta. Miro y le digo que ha quedado tercera de las prebenjamines (600 metros en 3’23”). Se pone súper contenta, y me dice que tiene que ir a decírselo a Esther. Júlia ha hecho 3’32”. Ha quedado sexta de las prebenjamines.

Vamos para allí, y se lo dice a su madre, a Fede y a Isa. Esta súper emocionada.
Al poco rato, empieza el reparto de premios y dicen su nombre. Está nerviosa, vergonzosa y orgullosa de lo que ha hecho.



Más que el premio, que considero que debería darse algo a todos los peques que corran (desde el primero al último), estoy orgulloso de su actitud y su espíritu de superación.

Como entrenador, he decidido poner punto y final a mi labor. Como Guardiola, Luis Enrique y Zidane, me he vaciado y necesito un descanso, ¡jaja! (aunque si me cae alguna oferta suculenta, la estudiaré). Pero sí que intentaré seguir con esos ratillos de padre e hija, que tanto hemos disfrutado.

Y ahora que ya habéis leído la parte importante de la crónica, os contaré la historia de la 12ª Cursa del Foc.

Tener una carrera que empieza a una calle de dónde vives, y no ir, parece sacrilegio.

Además este año, por fin, eliminaba la parte fea del recorrido (los dos polígonos). Para algunos tendría su qué, pero para mí, ya me los pateo mucho durante el año, y me gustaba más un recorrido más urbano, con más animación y donde la familia me pudiera ver en más puntos.

Con estos cambios, intenté picar a los Dani’s (Dani Soriano y Dani Llorens (Hoommerr)) para que hicieran en mi pueblo la Dani’s War Revenge. No tardaron mucho en “caer”, aunque que creo que fue más por el precio (4€) que por mi efecto de atracción.

Hecho esto, me quedaba la segunda cosa que más ilusión me hacía. Poder hacer los consejos express para el blogmaldito. Le pedí a David si me dejaba hacerlo, y no me puso ninguna pega. Al revés, me animó a hacerlo.

Así que un lunes que tenía fiesta, cogí la cámara de foto, y realicé el recorrido de 5 kilómetros analizando cada curva, cada zona, para poder ayudar a todos los que quisieran venir a hacer esta carrera.

El martes, antes de la carrera, David lo colgó en su blog, y para mí fue todo un orgullo.

Respecto a la “batalla” de los Dani’s, finalmente no tendría lugar. Dani Soriano nos comunica que no vendrá. Así, que el fin de semana anterior hablo con Hoommerr para ver que quiere hacer.

En principio me dice que bajar de 50’ estaría bien. Le digo que si quiere, podemos hacer la primera vuelta en 25’ y la segunda más rápida. Me dice que sí. En principio Fede también se apunta a este grupito. Y más tarde también lo hace otro compañero de corredors.cat, Diego.

Con todo esto planificado, llega el día D.

A las 6:30h me levanto. Almuerzo. Y a las 7:30h ya estoy en la calle para ir a buscar los dorsales de Dani, Fede, Ona y el mío.

A esa hora, no tardo ni dos minutos en recogerlos. Así que subo a casa a dejar el de Ona y su camiseta.

Cuando bajo, Dani me llama que ya está en Olesa. Lo voy a buscar, para ver donde podemos aparcar. No tardamos mucho en encontrar un sitio en uno de los descampados.

De camino para la salida, le doy a Dani su dorsal y su camiseta de corredors.cat, que recogí ayer en los 1000 metros sociales que organizaron en la Mar Bella.


Vemos a RubgyMan, Jorfer, Jaume y Josep en una cafetería, y entramos a saludarlos y hacer un café antes de la cursa (tradición corredors.cat, ¡jaja!)

Cuando salimos, ellos todavía tienen que ir a recoger el dorsal, ya veo a Fede y a Isa (que finalmente le apuntaron ayer a la de 5 kilómetros).


Le doy el dorsal a Fede, y le presento a los compañeros de corredors.cat.

También saludo a mi hermano y a mi cuñada. Harán la de 10 kilómetros y 5 kilómetros, respectivamente.

Foto de corredors.cat, y dejamos las cosas en guardarropía, pasamos por el lavabo, y nos vamos a calentar.


No hacemos el último kilómetro, pero si 800 metros de ida y 800 metros de vuelta.

Dani se va al lavabo y Fede se ha ido con Isa. O sea, que he perdido a mis compañeros de la carrera.

Pero por fin, a poco de empezar, nos volvemos a encontrar los 3.

A las 9:00h salimos.

Nos hemos colocado entre las liebres de 45’ y 50’.

La salida es cómoda, y me permite ver y saludar a mis fans.



En esta calle todavía da la sombra y se está relativamente bien.

Los primeros giros, son los peligrosos, pero esta vez nadie se ha caído. Además las obras que estaban haciéndose se acabaron el sábado y este año han retirado los vehículos aparcados de los dos lados, por lo tanto, la zona ha quedado más ancha.

Hasta la rotonda no puedo ver a Fede. Se ha quedado detrás de nosotros. Ha decidido salir con Isa, y además ha tenido que pararse a atarse de nuevo los cordones de las zapatillas.

Pero antes del primer kilómetro ya lo tenemos al lado. Cuando llega nos dice que ya va asfixiado, pero veo que aguantará poco con nosotros y se irá hacía adelante.

Ya veo a mis fans, que nos hacen la foto y nos animan.




Comienza un trozo bonito, pero con ligera pendiente. De esos tramos que no parecen subida, pero lo son.

Sobre el kilómetro 1,5 ya veo a la Chus, que nos avisa de un cartel que hay (para que no nos dejemos la cabeza en él) y nos anima. Le agradecemos sus ánimos.

Cogemos toda la sombra que podemos.

Pasamos por el kilómetro 2. Vamos bastante clavados. A Fede ya los llevamos unos metros por delante de nosotros.

Le comento a Dani que ahora viene una recta larga y con ligera pendiente. Que mejor guardar, y recuperar en la bajada “fuerte” donde podremos recuperar el tiempo que hayamos podido perder.

Así lo hacemos. Bajamos más fuerte, y llegamos al giro de 180º. Los voluntarios nos animan mucho, y nosotros no paramos de agradecérselo a todos ellos.

Antes del kilómetro 3, cogemos agua. Me la da Elena (hija de Carles y Chus).

El kilómetro 3 ya sale más rápido.

La gente se ha dispersado y vamos bastante cómodos.

Intentamos aprovechar el perfil de ligera bajada para arañarle unos segundos al crono, antes de la “gran subida”.




Y llegamos a nuestro primer encuentro con la subida más fuerte del recorrido. 

Solo son 200 metros, pero en la segunda vuelta pueden hacer mucho daño.

Lo pasamos muy bien. Y me permite saludar al Carles Font, al Cristóbal Zamora que van grabando y ayudando a una chica de su grupo.

Bajamos de nuevo y ya nos dirigimos hacia el cuarto kilómetro. Ya nos hemos puesto a ritmo de 4’45”.

En el kilómetro 4 y pico ya veo a Carles, que también nos anima. Le choco la mano, y nos vamos a por esa primera vuelta.

Me sirve para enseñarle a Dani el perfil de esta recta a meta. Hace falta vigilar el primer tramo, porque no sube mucho, pero sube.

Vamos a buen ritmo, y a media recta tenemos a Lorena animándonos.

Y ya nos vamos para el lado derecho para seguir con los otros 5 kilómetros. 

Antes, saludamos a Esther y Ona, que están allí animándonos y haciéndonos las fotos de recuerdo.






En este punto, le comento a Dani porque no dijimos de hacer la de 5 kilómetros, ¡jaja! Creo que ese mismo pensamiento lo ha tenido el 80% de los que hemos hecho la carrera larga.

Dani me dice que no cree que haga la segunda vuelta al mismo ritmo, que tendrá que bajar un poco el pistón. La primera vuelta la hemos pasado en 23’48”.

Antes de llegar a la zona de los giros, ya veo a Fede. Nos saludamos y chocamos las manos.

Intento no tirar mucho, pero ahora me encuentro bien, y voy unos metros por delante de Dani.

Él aguanta, yo no apretó más (pero tampoco aflojo) y vamos cogiendo a corredores y corredoras. Y eso, aunque parezca mentira, motiva.

Volvemos a recibir los ánimos de Chus, y de nuevo seguimos buscando esos trozos de sombra, ahora cada vez más justos.

El hecho que sean dos vueltas de 5 kilómetros hace que ya conozcas las sorpresas del circuito, y que puedas ir adaptándote a tus sensaciones. Pero las nuestras son bastantes buenas, porque mantenemos un ritmo constante (4’50”).

Hoy hace calor, y cogemos agua en todos los avituallamientos. Un poco para beber, y otro poco para mojarnos y refrescarnos.

Así en el kilómetro 7,5 vuelvo a coger agua. Esta vez me la da Joan (hijo de Carles y Chus). Ya he saludado a toda la familia en esta carrera, ¡jaja!

Y pasamos por el kilómetro 8. Le comento a Dani, que ahora hay que apretar los dientes. Lo tenemos y no podemos dejarlo.

Me pongo delante de él, y lo animo todo lo que puedo. Sobre todo para pasar con nota la segunda subidita.

Lo conseguimos y ahora ya sí que lo tenemos.

Al pasar por el kilómetro 9, Dani me dice que si hacemos el último kilómetro en 5’, estaremos en 48’.

Le digo que eso lo tenemos fácil. Que aguataremos a este ritmo hasta la mitad de la recta, y luego a darlo todo.

Me pongo delante y Dani me sigue.

Saludamos por última vez a Carles, y a por la recta.

A buen ritmo llegamos al punto de cambio de perfil. Aquí entre los ánimos de Lorena (incluida foto) y la proximidad de la línea de llegada, nos podemos a ritmo rápido.



Faltando unos 150 metros me adelanto un poco más para coger a Ona, y después de chocar las manos con Dani, entramos los tres en un meritorio 47’31” (Dani 47’30”). ¡Perfecto! Le hemos ganado dos minutos y medio a lo que queríamos hacer. Y eso que ha hecho mucho calor. La segunda vuelta en 23’43” y ganando 14 posiciones.


Rápidamente, ya vemos a Fede que se ha marcado un 45’16”. Jordi ha hecho 40’59”. Las mujeres del equipo, Isa y Anabel, han hecho la de 5 kilómetros en 33’16” y 29’24”.



Después de un rato de charla y de cambiarnos de camiseta, nos hacemos una foto del grupo de hoy.


Después le damos el regalo al abuelo. ¡50 años ya!


Y todavía nos ha tiempo a Fede y a mí a subir a buscar el premio de mejor equipo de 10 kilómetros para corredors.cat. Como mola, se lo curran Jordi, Oscar y Josep, y lo cogemos nosotros, ¡jaja!

Después nos vamos, y suerte que otro compañero de corredors.cat, recogió el premio de equipo más numeroso. ¡Jaja! nosotros como Ona, con un premio ya estábamos contentos.


Ahora a por los 5 kilómetros de Pallejà, y a despedir la temporada el día de mi cumpleaños (¡42 tacos ya!)

PD: ¡Gracias a todos los fotógrafos por las fotos (Esther, Fede, Isa, Wolves, Lorena, ...)!