Así se despedía el Capitán Hannibal Smith en la serie El
Equipo A, y no encuentro mejor resumen de esta carrera, pero empecemos por el
principio.
Lo reconozco, ¡estoy enganchado! Hace unas semanas que acabé
el primer objetivo grande de la temporada y ahora quería parar unos días, pero
un whatsapp de Sergio avisando que hacían esta carrera y que quería probar de
hacer sub20 en los 5 kilómetros, y allá que vamos. Son 3 eurillos y la
totalidad se dona a una causa benéfica, por lo tanto, con más motivo teníamos
que participar.
Con muchas dudas de poder hacer ese tiempo, decido hacerle
de liebre lo que pueda (2,5 – 3km). Las piernas están fuertes, pero hace más de
4 meses que no hago entrenamientos de series. Un primer entrenamiento de
intervalos el Domingo me deja claro que podré aguantar bien unos 3 kilómetros y
después él se tendrá que espabilar para llegar a meta en el tiempo propuesto. A
todo esto, conseguimos “engañar” a Sandra. Como tampoco sabe si está rápida,
hacemos un segundo entrenamiento rápido el miércoles. Corremos 4 kilómetros a
ritmo alto y las sensaciones no son perfectas pero los hicimos por debajo de
4’20” el kilómetro, ¡bastante bien!
Al final, Sergio trabaja y no podrá ir, pero Sandra y yo ya
estamos demasiado animados y nos apuntamos aquella misma noche, ¡ya tenemos
nuevo reto!
El objetivo es intentar hacer de liebre a Sandra, para ver
si puede ganar el premio de su categoría (Vet+40).
Todo en esta carrera es extraño. Nos hemos apuntado a última
hora, empieza a las 11:15 (con el calor que hace) y he podido levantarme y
almorzar con mis niñas (cosa que no pasa casi nunca).
A las 10h, encuentro a Sandra y al resto de sus compañeros
del SAC (Sociedad Atlética de Corbera).
Recogemos los dorsales y vamos a cambiarnos, hidratarnos y
dejar la bolsa en el coche de uno de sus compañeros.
Empezamos a trotar suavemente, durante unos 15 minutos.
Estiramos y nos dirigimos hacia la línea de salida. No hay demasiados
corredores, unos 300, y nos colocamos en la tercera hilera de corredores. Sandra,
Esther y Sam quieren hacer una buena clasificación. La idea es poner un ritmo
de 4:20 y llevarlas a las tres hasta el final.

Una vez volvemos a lo plano, decido aflojar, sino no
llegaremos. Me pongo al ritmo marcado. Hace mucho calor, y casi no puedo animar
a Sandra porque tengo toda la garganta muy seca. Intento no dejarla muy atrás,
sin aflojar demasiado el ritmo. Siempre llevamos a Esther por delante, pero a
Sam la hemos perdido totalmente de vista.
Sobre el kilómetro 1,5 llega la primera de las subiditas del
recorrido. No es demasiado larga, pero quien se ha pasado al principio lo
empieza a pagar, y pasamos a algunos corredores y corredoras (algunos andando).
Sandra no se descuelga y esto es buena señal. Cuando veo que
llegamos arriba le digo que ya está, que ya hemos acabado la primera parte
difícil del recorrido.
Pasamos por el kilómetro 2, que hemos hecho al ritmo que
queríamos (vamos bien, ¡¡muy bien!!).
El calor empieza a notarse mucho, no hay espacios de
sombras, sufriremos.
Por suerte, en el kilómetro 2,5 encontramos el punto de
avituallamiento. Cojo una botella. Bebo, me mojo un poco la cabeza, y aflojo
para pasarle la botella a Sandra. Bebe, y volvemos a ponernos a ritmo.
Al principio cuesta un poco, pero lo intentamos, aunque bien
pronto llega la segunda y última subida.
Creo que esta es más larga que la primera, pero también la
conseguimos pasar.
No hemos perdido demasiado tiempo, y ahora sólo nos queda
menos de 2 kilómetros con un perfil más suave o en bajada.
Voy mirando hacia atrás para ver dónde llevo a Sandra. Tengo
que ir aflojando para no dejar demasiada distancia entre nosotros, cosa que nos
podría afectar.
Pasamos por el kilómetro 4 y ya queda poco para acabar. No
sé en qué posición vamos. Sé que llevamos a Esther (SAC) por delante pero no
creo que la podamos atrapar. Me giro de nuevo, y veo que no hay ninguna chica más detrás de Sandra, por lo
tanto, aguantaremos con el ritmo que traemos, que ya es bueno.
Yo voy animándola, gritándole, y le recuerdo que la línea de
llegada no es en el globo que hay (donde hemos salido), sino que tenemos que
llegar abajo de la calle, girar y volver a subir unos 250 metros.
Justo en el giro, a Sandra le dicen que va tercera de la
general. Yo la animo (no sabía la posición) y veo que ella aprieta. Miro el
crono de la llegada y veo que haremos mejor tiempo que en Pallejà.
Finalmente, paro el reloj con un tiempo de 21:10, y Sandra
pasa por la llegada con 21:13.
Estamos contentos, ¡muy contentos! Queríamos hacer primera
de categoría y hemos conseguido hacer 3a de la general. Además, Sandra ha hecho
su Mejor Marca Personal, mejorándola en 13 segundos.
Esther, compañera de Sandra, ha quedado segunda (20:54).
Por mala suerte, la otra compañera de Sandra, Sam, se ha
hecho daño en el tobillo. Se ha tropezado con unas piedras que separaban los
carriles del primer kilómetro y no ha podido continuar. ¡Mala suerte! Que se
recupere rápidamente.
Vamos a coger las bolsas y volvemos corriendo a la zona del
podio. Por el camino me quedo con el dorsal 328 de Rafa Canillo que ha quedado
sexto y tercero de su categoría (vet+40). Él no se puede quedar y yo subiré al
podio para cogerle el premio y Sandra se lo dará a él más tarde.
Empieza la entrega de premios y subimos hasta 5 veces (poco
más y nos echan, ¡jaja!)
Ha sido una buena mañana, dura, con calor, pero con los
planes conseguidos y una copa más en el zurrón y en el palmarés de Sandra y del
Club Los Martes.
Ahora a preparar las carreras de Junio, todas cerca de casa
(Abrera, Olesa de Montserrat y Pallejà).
Nos vemos.