divendres, 15 de gener del 2016

Cinc Cims (“No perdáis nunca la ilusión”)

Nos hacemos grandes y vamos perdiendo la ilusión de muchas cosas, y sobretodo de los Reyes Magos. Y ahora ya os puedo decir que sí que existen, o al menos el mío preferido. Se llama Carles. No tiene barba, ni pelo. No viene de Oriente, ni está gordito, más bien digamos que está bastante delgado, pero tiene un gran corazón.

Ahora os explicaré porqué es mi Rey Mago.

Estoy en casa después de la Maratón de Castellón. Estoy en época de “descanso”, e iré al Cinc Cims a hacer fotos a los compañeros que la harán. Y me llega un whatsapp de Carles diciéndome que está fastidiado por una puñetera lesión. No puede correr, y me dice que le haría mucha ilusión que la hiciera yo por él. Le digo que me lo pensaré, pero no tardo ni 24 horas en decirle que sí, y así tengo mi primer regalo de Reyes. ¡Muchas gracias!

Unos cuantos entrenamientos por montaña, y llega el día de la Cinc Cims.

Vamos unos cuantos amigos de Los Martes: Sergi, Sandra, Jordi y yo. También viene la mujer de Carles (Chus). Sergi y Jordi irán a bajar de las 3h, y si pueden batir el récord de Fede (2h53’51”). Yo iré con Sandra (a ver si bajamos de las 3h10’, su MMP) y Chus quiere llegar antes de las 4h30’ que da la organización para acabarla.

A parte de esto, tenemos todos nuestros animadores (Carles, Joan, Elena, Anabel, Júlia, Fede, Esther, Ona, padres de Carles, padres de Chus, Nil, madre de Sandra y Óscar). Un buen grupo.

Todo el grupo
En la recogida de dorsales nos encontramos a Xavi Moreno (hace mucho que no lo vemos). También vemos al primo de Isa (Sergio) y otros corredores de Olesa y cercanías.

Nos vamos animando y después de unas cuantas vueltas a la pista deportiva, nos ponemos en la línea de salida. Este año hay 3 cajones de salida. Jordi y Segi se ponen al final del primero. Sandra y yo en medio del segundo, y Chus en el tercero.

A las 10h sale el primer grupo. Y cinco minutos más tarde, Sandra y yo comenzamos nuestra carrera.

Solo salir miramos a los lados y conseguimos ver la manopla azul de Esther. Saludamos a los animadores y hacia abajo.

Comenzar en bajada es muy bueno, pero cuando se acaba comienza una subida fuerte y larga. Aquí la gente ya comienza a caminar. No sé si es estrategia o falta de preparación, pero ya me sorprendió la primera vez y hoy también.

Voy un poco por delante de Sandra, y a media subida me aparto un poco para esperarla. Antes del final de la subida vemos a Nil y a la madre de Sandra. Los saludamos, y seguimos.

El camino nos lleva a la zona del Pesebre viviente. Pasamos por el medio del Pesebre y vemos a un señora con unos cascabeles. No para de moverlos y animarnos.

Paso por el Pesebre Viviente de Corbera
Comenzamos a bajar hacia el río, y ya encontramos un poco de tapón. No vamos muy parados, pero no la bajamos todo lo rápido que lo habíamos hecho en el entrenamiento.

En la zona del río no encontramos caravana, pero vamos en fila de uno.

Se acaba esta zona y comienza la subida hacia la Creu d’Aragall (primera cima).

Vamos haciendo, y vamos avanzando a bastantes corredores y corredoras. A veces me voy aparatando para no dejar muy detrás a Sandra.

Los kilómetros van pasando y a un ritmo similar al día que hicimos el entreno llegamos al primer avituallamiento. Le digo a Sandra si quiere que coja algo, pero me dice que no, y cogemos un camino estrecho (para mí nuevo).

Sandra me dice que aquí es donde el año pasado estuvo parada durante 5 minutos, por el tapón que se hizo. Hoy no hay tanto tapón, pero hemos estado parados un buen rato (creo que en todo este tramo y la última subida a la Creu hemos “perdido” unos dos minutos).

Al subir caminando, se hace más cómodo que otras veces. No entiendo tampoco aquellos corredores que les entran las prisas, y que por avanzar dos posiciones pueden provocar que se hagan daño ellos y otros.

Después de este “paseo” ya escuchamos los gritos de la gente que hay en la Creu. Una mirada rápida a todas las vistas, sobretodo a la montaña de Montserrat, un poco de agua y bebida isotónica, y hacia abajo.

Hace viento, y si paramos mucho podemos coger frío.

Este tramo es de bajada, por lo tanto, recuperamos las piernas hasta la carretera. Allí volvemos a subir un poco para ir a coger el camino de la segunda cima.

Justo antes de la subida volvemos a ver a Nil i la madre de Sandra. Los saludamos y marchamos.

El primer tramo de esta nueva subida es bastante pronunciado, y Sandra y yo lo hacemos caminando. Intentamos caminar rápido (a 9’/km), pero vale más eso que perder fuerzas que necesitaremos más adelante.

Cuando ya pasamos esta zona, volvemos a correr.

Sin casi darnos cuenta ya estamos en el segundo pico.

Volvemos a coger una parte bastante plana, aunque con sus toboganes. Aquí me escapo un poco de Sandra para ir al lavabo. Entre el sprint para cogerle unos metros, y el sprint para cogerla después, me he hecho un buen “calentón”.

De nuevo cruzamos la carretera, y comenzamos un nuevo camino estrecho que nos llevará al segundo avituallamiento y a los pies de la tercera cima.

Aquí el Sol calienta y no hace viento. Se está muy bien.

En este punto nos tomamos el gel energético. Bebemos un poco de agua, y sin perder más tiempo vamos hacia arriba.

Hacemos un buen tramo corriendo, pero en el último tramo Sandra y yo comenzamos a caminar.

Pisamos la alfombra de control y por un sendero subimos al camino que nos llevará a los pies del Forrellac.

Llegamos al caminillo que nos llevará a la nueva cima, y aquí volvemos a caminar. Como llego unos cuantos segundos antes que Sandra, puedo pararme a disfrutar de las vistas. El viento, que aquí se nota más, ha dejado un cielo limpio y unas vistas espectaculares. Se ve todo, es impresionante.

Llega Sandra, y continuamos por una bajada corta pero bastante peligrosa.

Gracias a NacióMuntanya por estas fotos tan chulas
Y como el que no quiere la cosa, llegamos a bajo y ya estamos a los pies del cuarto pico. Comenzamos a subir (el objetivo es correr hasta la parte asfaltada) pero el viento de cara hace que bastante antes nos pongamos a caminar. Le digo a Sandra que se coloque detrás de mí, y así el viento no le afectará tanto. Subimos caminando pero a un buen ritmo. Y por fin, aunque se hace largo, llegamos a la bola, punto característico del Pic d’Agulles.

¡Ya tenemos 4 cimas hechas!

Inicio de bajada peligrosa y después la riera. Aquí de nuevo nos encontramos a aquella señora que llevaba los cascabeles. Me ha hecho gracia encontrarla de nuevo.

Hay mucha piedra suelta, y sin saber cómo me tropiezo con una, y casi me salgo del camino. Por suerte, puedo aguantarme en pie, pero me he hecho un pequeño tirón en el brazo izquierdo. Me hace un poco de daño, pero rápidamente se me pasa.

Vamos bajando y cuando ya estamos cerca del final, escucho un grito de Sandra. Se ha vuelto a torcer el tobillo. ¡Ostras, no! En el entreno ya le había pasado, y hoy iba pensando que lo haríamos sin ningún contratiempo.

Paramos unos segundos, dejamos pasar a unos corredores, y comenzamos a correr para comprobar que sólo ha sido un “susto”. Parece que así es, y sin forzar llegamos al final de esta larga bajada, y ya cogemos la subida que nos llevará a Sant Ponç.

Hacemos tramos corriendo y tramos caminando y antes de girar hacia la ermita, volvemos a ver a la madre de Sandra y a Nil. Chocamos manitas y hacia el avituallamiento.

Nos hidratamos, comemos un trozo de coca, y hacia abajo.

Bajando, llevo delante un chico con unas five fingers (zapatillas minimalistas). No me puedo creer que sean cómodas. Yo voy con las bambas normales y tengo los talones destrozados de las piedras. Pero cojo la táctica de ir pisando donde lo hace él.

Así, entretenidos, llegamos a la pista que nos llevará a la quinta cima.

No tardamos mucho.

El primer tramo es un sendero estrecho. El chico que llevamos delante nos dice si queremos pasar, pero ya vamos bien detrás suyo.

Cuando llegamos al final, nos encontramos a un sacerdote, que nos da su bendición. Creo que nos hará falta para poder llegar arriba del PuigMontmany.

Acabada esta zona y con el recorrido más plano, comenzamos a correr de nuevo. Lo hacemos así hasta que llega la primera gran subida, y comenzamos a caminar. El ritmo no es muy lento, y vamos avanzando a algunos corredores. Un rato caminando, y otro rato corriendo, según el perfil, llegamos al último tramo complicado. Con ganas de llegar a la cima, comenzamos a escuchar los gritos que ya lo tenemos. Ya estamos en la quinta cima, ya sólo queda la bajada.

Y la comenzamos. La primera parte pasa rápida y llegamos al avituallamiento. Agua, líquido naranja y hacia abajo, que hace bajada.

Pasamos un par de subiditas, por el lado del golf, y cada vez estamos más cerca de volver al pueblo.

Seguimos las instrucciones de los voluntarios que nos van indicando el recorrido, y por fin llegamos al Passeig dels arbres. Comienza con un tramo corto pero con una subida que parece el sexto pico.

Las piernas se comienzan a cargar y me parece que no avanzo.

A medio camino, me encuentro a David (blogmaldito) haciendo fotos y animando. Nos saludamos y continuo hacia mi objetivo. Ya veo la llegada, la batukada, y por el camino veo a mi Rey (Carles), y al resto del grupo de animadores. Cojo a Ona y entramos juntos. Detrás de mí llega Sandra con Nil.

¡Animando! ¡Así Joan!
Sorpresa al recibir una medalla, no lo sabía, y me gusta este tipo de reconocimiento, sobretodo en estas carreras con más dificultad.

Al final hemos hecho unos segundos menos de las 3h10’, por lo tanto, objetivo conseguido y muy buenas sensaciones.

Caminando voy a por la butifarra, la bebida y a pasar por las manos de los masajistas. Aquí me encuentro con Jordi. A hecho 2h59’03”, objetivo conseguido.

Más tarde encuentro a Sergi, ha hecho 2h53’35”. Está enfadado, porque ha tenido algunas rampas y no ha podido hacerlo todo lo rápido que quería, pero con los días se dará cuenta del magnífico resultado que ha hecho. Además, ha conseguido el record de Los Martes en esta carrera.
Llegadas, éxitos, objetivos conseguidos

Marcho hacia la ducha, y sorpresa. No hay agua caliente. No está helada, pero está fría. Dicen que va bien para destensionar los músculos, pero prefiero el agua caliente. ¡Suerte que hoy no hace mucho frío!

El descanso del guerrero
Al salir, recibo la noticia que Chus ya ha llegado. A hecho 3h56’. ¡Que bien!

Las autenticas campeonas
Una vez todos duchados, nos vamos al restaurant Sant Telm, donde Sandra nos ha organizado un pica-pica y hemos podido pasar un buen rato. Nos lo hemos ganado todos, los corredores y los animadores.

Ahora a descargar piernas, y pensar en nuevos objetivos.

¡Nunca tenemos que perder la ilusión!

PD: Si podéis, haced esta carrera una vez en la vida. ¡Vale mucho la pena!

Para muestra podéis ver este video. Salimos todos, jaja, parece el video promocional de Los Martes, ¡jaja!

2 comentaris:

  1. Xavi, gracias por hacerme de liebre, me ha ido muy bien, me has animado toda la carrera, y además objetivo conseguido!!!
    Me encanta que corrais la cinc cims, no hay nada como correr en casa y con mis amigos, la próxima en tu casa, Olesa!
    Como siempre una crónica espectacular, un placer pertenecer a los Martes y tener un Mister como tu 😊

    ResponElimina
    Respostes
    1. La Cinc Cims es muy chula, y salió la oportunidad de compartir kilómetros contigo, y no podía desaprovecharla. Nos vemos en Olesa, ¡Te gustará!

      Elimina